Socialización
El desarrollo social en la primera infancia se refiere al proceso mediante el cual los niños pequeños aprenden a interactuar con los demás, a comprender y a manejar sus emociones y a establecer relaciones sociales. Durante esta etapa, los niños y niñas comienzan a desarrollar habilidades que les permiten comunicarse, cooperar y relacionarse con otros de manera adaptativa. Estas habilidades son fundamentales para su bienestar emocional y para su capacidad de formar relaciones saludables a lo largo de la vida.
Las habilidades sociales adquiridas durante la infancia influyen en la capacidad de los más pequeños para formar relaciones saludables, regular las emociones, desarrollar la empatía, comunicarse eficazmente y resolver conflictos.